dijous, 7 d’abril del 2016

Las Profecías: Cóldoraz

Mientras Galván, mago de la tierra, paseaba por la ladera de la montaña en una de sus inspecciones rutinarias, el tremendo susto que se llevó no le resultó fortuito: una de las rocas que sobresalía de la montaña, a su paso, se fragmentó. Por suerte le acompañaba su ayudante Osman que, al percatarse de la grieta, tiró del ensimismado mago evitando el desastre.
Este hecho ya le resultó bastante curioso pero, cuando al volver hacia Darkan, la capital, observó que incluso las piedras más pequeñas se fragmentaban a su paso, decidió consultar los antiguos manuales de magia. Mandó a Osman a casa mientras él se encerraba en la sala privada de la Biblioteca, aquella sala a la que solamente podían acceder los miembros del Consejo y el mago de Cóldoraz y que quizá por aquello, estaba llena de polvo y telarañas... Galván adecentó una parte de la lujosa mesa y una de las sillas, acercó unos cuantos pergaminos y comenzó a leer a la luz de la lámpara de aceite que alumbraba aquel lugar. Casi al anochecer, encontró un pergamino que le hizo acercarse a la lámpara y dejar su postura de lectura relajada para cambiarla a una posición tensa. Incluso le cambió el gesto, pues un rictus de preocupación apareció en su rostro.


dimecres, 6 d’abril del 2016

Las Profecías: Ébastan

Seguía haciendo mucho calor en Kálen'dir, los primeros días de aquella edad eran tremendamente calurosos y los ríos y afluentes transcurrían revueltos, por eso Morgán, el mago de agua, trataba de atenderlos a todos aunque sentía que algo más estaba pasando. Ante sus inquietudes, como solía hacer, consultó al río Brélamos, el más largo y sabio de todos los ríos de Kálen'dir. Aquello que pudo hablar con el río le resultó tan inquietante que decidió ir a la biblioteca de Ádasu, la capital, a consultar los viejos pergaminos. Primero leyó las Crónicas y al no encontrar nada, recordó un pequeño libro en el que su antecesor le había dicho que en él encontraría unas profecías que debía tener en cuenta. Cuando lo encontró en un rincón de la sala, leyó la primeras y descubrió que ya se habían cumplido, cosa que le llevó a sorprenderse mucho más cuando encontró la siguiente:



dimarts, 5 d’abril del 2016

Las Profecías: Vandaria

Fergus, el mago de aire, llevaba unos días bastante preocupado por los rumores que arrastaba el viento así que pensó en ir a la biblioteca de Taris, la capital del reino, por ver si encontraba algún texto que le indicara qué hacer. Estuvo un tiempo buscando entre los libros de climatología e incluso navegación pero no encontró nada parecido a aquello que había sentido. De pronto, como un relámpago, una idea atravesó su mente. Sin pensarlo demasiado se dirigió con paso firme a la sala de los documentos de Vandaria, donde se encontraban las Crónicas del Reino y otros textos importantes. Allí, buscó entre los pergaminos más antiguos y lo que encontró le dejó sin palabras...